Capítulo 239
Capítulo 239
Melody abrió la puerta y se encontró con Briar; ni corta ni perezosa, intentó cerrarla de un golpe.
Pero Briar bloqueó rápidamente el movimiento, con una voz helada dijo, -Salgamos y hablemos-
-¿Hablar?–
Melody rio como si hubiera escuchado un chiste, -¿Qué hay para hablar entre nosotros? ¿Hablamos de la muerte de mi hermano o del secuestro de Eric?–
Esa actitud punzante de Melody le clavó un dolor a Briar en el pecho.
Briar esbozó una sonrisa sarcástica, -Melody, ¿realmente soy así de despreciable a tus ojos?–
Melody alzó la barbilla con desafío, -¿Acaso no fue así como me viste en aquel entonces?–
Briar sintió que su corazón se enfriaba bajo la mirada de ella. NôvelD(ram)a.ôrg owns this content.
-Realmente vine a hablar contigo sobre algo-
-No queremos hablar contigo- Antes de que Melody pudiera responder, Eric, que estaba detrás de ella, intervino.
El niño se puso delante de Melody como un adulto, intentando protegerla con su pequeño cuerpo de cualquier ataque que Briar pudiera lanzar. Ese gesto hirió la vista de Briar, era irónico ver a su propio hijo adoptar una postura tan defensiva frente a él.
Eric fijó su mirada en Briar, -Si no tienes nada que hacer, puedes irte-
Briar miró esa pequeña cara que era casi idéntica a la suya y de repente sintió que era un extraño.
Este niño, que llevaba la mitad de su sangre, nunca se acercaba a él y, por el contrario, hacía todo lo posible por vengarse y dañarlo.
Qué ridículo era, pensó, él como padre haber llegado a tal punto.
Melody suspiró desde afuera de la puerta y notó la vieja herida en la mano de Briar, probablemente de cuando rompió la ventana del coche y aún no había sanado. Desvió la mirada, -Briar, no hace falta, si vienes por lo de Jade, mejor vuelve a tu casa-
Ella trató de ser lo más cortés posible, pero incluso esa cortesía hacía que Briar sintierà que la distancia entre ellos era aún más grande que la de dos extraños.
(.
Briar agarró la puerta con fuerza, -Melody, sal, hablemos de lo que pasó hace cinco años…-
-¿Hace cinco años?—
Al escuchar esas palabras, Melody sonrió con ironía, -¿Qué quieres saber?—
-Quiero explicarte, no escuches los rumores de internet, hace cinco años Jade no se interpuso
entre nosotros…-
-¡Cállate!– Tan pronto como escuchó eso, Melody estalló, —¡Briar, tú eres el que menos derecho tiene de explicarme sobre lo que pasó hace cinco años!–
Su súbita furia asustó a Briar, quien se sobresaltó, -Melody…-
18:281
-Si Jade no fue la otra, ¿qué pasa con Eda? ¿Acaso Eda no cuenta como la otra? ¡Briar, crees que tienes la razón después de haber sido infiel dentro del matrimonio!– Melody lo interrogó con los ojos enrojecidos, -¡Yo era la esposa que oficialmente llevaste a la casa Yelamos y tú pasabas las noches con Eda! Ahora vienes a explicarme que nadie se interpuso en nuestro matrimonio, ¿es porque Eda murió y ya no existe? ¡Incluso si ella está muerta, eso no cambia el hecho de que era la otra!–
Melody gritó hasta desgarrarse, y Trey, que estaba en la sala jugando videojuegos, se quedó paralizado al escucharla.
¿Hace cinco años…?
Afuera, Briar temblaba por las palabras de Melody, mirando esos ojos rojos como sangre, se quedó sin palabras.
Si antes Melody se hubiera atrevido a decir una mala palabra sobre Eda, Briar la hubiera estrangulado hasta la muerte, pero ahora, cuando Melody llamaba a Eda la otra, Briar no tenía fuerzas para responder.
Mirando su desesperación y sus ojos rojos e hinchados, se sentía como si lo estuvieran torturando con un cuchillo.
Recordando a la Melody de hace cinco años y a la mujer enloquecida frente a él, Briar sintió un dolor agudo.
Tenía que admitir que había arruinado a dos mujeres: había destruido a Eda, a quien amaba, y a Melody, que lo amaba a él.
Las manos de Briar temblaban. —Melody, cálmate, ¿qué tal si dejamos el pasado atrás…?—
-¿Dejar el pasado atrás?– Melody se reía con una mezcla de despreocupación y locura. -¿Cómo es eso, acaso vamos a hablar del fut